Every Student Succeeds
Act, "ESSA"
Una nueva ley de educación
La Ley Cada Estudiante Triunfa (Every
Student Succeeds Act, "ESSA") fue firmada por el presidente Obama el
10 de diciembre de 2015, y es una buena noticia para las escuelas de nuestro
país. Esta medida bipartidista reautoriza la Ley de Educación Primaria y
Secundaria (ESEA), la legislación de educación nacional que se compromete a la
igualdad de oportunidades para todos los estudiantes de la nación, y vigente
desde hace 50 años.
La nueva ley se basa en áreas clave del
progreso en los últimos años, que ha sido posible por los esfuerzos de los
educadores, comunidades, padres y estudiantes en todo el país.
Por ejemplo, hoy en día las tasas de
graduación de escuela secundaria están en su nivel histórico más alto. Las
tasas de abandono escolar están en mínimos históricos. Y más estudiantes
asisten a la universidad que nunca antes. Estos logros constituyen una base
firme para seguir ampliando las oportunidades educativas y así mejorar los
resultados estudiantiles con ESSA.
La versión anterior de la ley, llamada
Que Ningún Niño Se Quede Atrás (NCLB), fue promulgada en 2002. NCLB fue un
importante paso adelante para los niños de nuestro país en muchos aspectos,
particularmente porque reveló donde los estudiantes estaban progresando y donde
necesitaban apoyo adicional, sin importar raza, nivel económico, barrio,
discapacidad, idioma o ascendencia. La ley estaba programada para ser revisada
en 2007, pero con el tiempo, los requisitos la de NCLB resultaron no viables
para las escuelas y educadores. Debido a eso, en 2010 la Administración de
Obama apoyó a los educadores y a las familias que pedían reformas a la ley para
mejor preparar a todos los estudiantes para el éxito en la universidad y en el
trabajo.
El Congreso ha escuchado esa petición.
Puntos
clave de ESSA
ESSA incluye disposiciones que ayudarán
a asegurar el éxito de los estudiantes y las escuelas. A continuación se muestran algunos. La
ley:
- Promueve la equidad mediante la protección crítica de los
estudiantes desfavorecidos y de alta necesidad en Estados Unidos.
- Requiere por primera vez que a todos los estudiantes en Estados
Unidos se les enseñe según altas normas académicas para que estén preparados
para el éxito en la universidad y el trabajo.
- Asegura que los educadores, familias, estudiantes y comunidades
reciban información vital de evaluaciones estatales anuales que midan el
progreso de los estudiantes hacia esa meta.
- Apoya y estimula la innovación local, incluido intervenciones según
la evidencia y el sitio, desarrolladas por los líderes y educadores
locales, y consistentes con nuestras iniciativas Inversión en la Innovación y Vecindarios Promesa.
- Sostiene y amplía las inversiones históricas de la Administración
para aumentar el acceso al preescolar de la alta calidad.
- Mantiene la expectativa de que habrá que responsabilizarse y tomar
acción para lograr un cambio positivo en las escuelas de más bajo
rendimiento, donde grupos de estudiantes no progresan y las tasas de
graduación son bajas durante largos períodos de tiempo.
La ley bipartidista para reformar Que
Ningún Niño Se Quede Atrás ayudará a garantizar la oportunidad educativa para
todos los estudiantes del país:
- Requiere altos niveles académicos de todos los
estudiantes;
- Prepara a todos los
estudiantes para el éxito en la universidad y el trabajo;
- Da acceso a más niños al preescolar de alta
calidad;
- Garantiza que se tomarán medidas para ayudar a
los estudiantes y sus escuelas a mejorar;
- Reduce el número de exámenes mientras se prestan
informes anuales a padres y estudiantes sobre el progreso; y
- Promueve la innovación local e invierte en lo que
da resultado.
Historia
de ESEA
La Ley de Educación Primaria y
Secundaria (ESEA) entró en vigencia con la firma en 1965 del presidente Lyndon
Baines Johnson, quien creía que la "oportunidad educativa total"
debía ser "nuestra primera meta nacional". Desde el principio, ESEA
fue una ley de derechos civiles.
ESEA ofreció nuevas subvenciones a los
distritos escolares que servían a los estudiantes de bajos recursos, subvenciones
federales para adquirir libros de texto y para las bibliotecas, fondos para
centros de educación especial y becas para estudiantes universitarios de bajos
ingresos. Además, la ley proporcionó subsidios federales a los organismos
educativos estatales para mejorar la calidad de la educación primaria y
secundaria.
La
NCLB y la rendición de cuentas
La NCLB estableció medidas que delataron
las brechas de rendimiento entre los estudiantes tradicionalmente marginados y
sus compañeros, y estimuló un importante diálogo nacional sobre cómo mejorar la
educación. Este enfoque en responsabilizarse por los resultados fue fundamental
en garantizar una educación de calidad para todos los niños, pero también
reveló problemas en la aplicación eficaz de esa meta.
Los padres, educadores y políticos por
todo el país reconocieron que una ley fuerte y puesta al día era necesaria para
ampliar oportunidades para todos los estudiantes; apoyar a las escuelas,
profesores y directores; y para fortalecer nuestro sistema educativo y la
economía nacional.
En 2012, la Administración de Obama
comenzó a otorgar flexibilidad a los estados para eximirlos de ciertos
requisitos específicos de NCLB a cambio de nuevos planes rigurosos de los
estados para cerrar las brechas de rendimiento, aumentar la equidad, mejorar la
calidad de la instrucción y aumentar los resultados de todos los estudiantes.
¿Y
ahora qué?
En las próximas semanas, el Departamento
de Educación de EE.UU. colaborará con los estados y distritos para implementar
la nueva ley. Visite esta página para inscribirse y recibir noticias sobre ESSA. https://public.govdelivery.com/accounts/USED/subscriber/new?topic_id=USED_5